REPRODUCCION EN LOS HURONES


La reproducción de los hurones es mucho más compleja que en otros animales domésticos. Los hurones no castrados son más dificiles de tener como animal domestico por su agresividad y por su fuerte olor en comparación a los no castrados. Con esto no queremos decir que no se puedan tener hurones no castrados en casa.

Ademas la agresividad en la cópula puede que crear lesiones o que las hembras enfermen por no tener un macho.

Elección de los Padres:

Debe de evitarse la consanguinidad entre los reproductores, para evitar futuros problemas genéticos.

Parece ser que el color es importante en el cruce, ya que hay variedades de color que son incompatibles. Por ejemplo si se cruzan dos hurones del mismo color, la camada se vera notablemente reducida.

Cuando tengamos ya la pareja de hurones que no esten emparentados, debemos tener en cuenta que hayan alzanzado su tamaño adulto.

En las hembras no se recomienda creiar antes de los seis meses y en los machos nueve meses como mínimo.

Una cosa muy importante es que si tenemos una hembra sin castrar debera estar destinada a la cría ya que las hembras tienen celos continuos y podran sufir anemia aplástica, que suelen llevarles a la muerte.

Y para finalizar, creiar es una responsabilidad, no se debe criar si no se sabe a donde van a ir a parar las crías.

La Cópula:

Los hurones suelen presentar dos periodos de cría al año, en primavera y en otoño, aunque no es extraño que los animales que viven dentro de casa no respeten estos ciclos debido a la luz artificial.

Se puede saber fácilmente cuando la hembra a entrado en celo. La vulva aparece enrojecida e inflamada, se produce un aumento del olor corporal y las patas posteriores pueden aparecer humedecidas como consecuencia de las descargas vaginales. Así mismo suele ocurrir que la hembra en celo se muestre inapetente.

En el caso de los hurones se recomienda que sea el macho el que es llevado a la jaula de la hembra. El mejor momento para la monta es el décimo día de celo. La cópula es violenta. El macho muerde a la hembra en la nuca y suele arrastrarla. Este comportamiento es necesario para que la ovulación se produzca adecuadamente. No es raro que la hembra sufra heridas durante esta experiencia.

Durante la cópula es normal que la hembra luche y emita gritos. Si esta dispuesta para recibir al macho cerrará los ojos y quedará flácida. Si se resiste en exceso, intenta morder con fuerza y libera secreciones de sus glándulas anales hay que retirar al macho, puesto que la hembra no está preparada.

Si todo va bien deberemos mantener a ambos progenitores juntos durante un par de días, durante los cuales comerán y beberán del mismo lugar y dormirán juntos. Durante este periodo de tiempo probablemente se aparearán varias veces. Transcurrido este retiraremos al macho.

La Gestación:

Tras la monta la vulva recuperará su aspecto normal en 24 - 48 horas. Si todo va bien la gestación durará habitualmente 42 días. Una semana antes de la fecha esperada de parto deberemos proporcionar a nuestra futura mamá un lugar donde instalar su nido. Un barreño o recipiente similar con un trozo de tela suave o una toalla (no demasiado relleno o las crías se perderán) es apropiado. Aproximadamente una semana antes del parto la hembra perderá algo de pelo, la vagina tomará un color amoratado y se mostrará más voluminosa, las mamas y pezones también aumentarán de volumen. El animal pasará más tiempo durmiendo del habitual. El parto debería finalizar en unas dos horas, aunque los animales primerizos siempre tardan más.

Si la hembra permanece más de una hora de parto sin que llegue a nacer ninguna cría o se la observa sin fuerzas o con los ojos vidriosos deberemos de llevarla de inmediato al veterinario.

El número de crías oscila entre 6 y 12, y la hembra se ocupa de cortar el cordón umbilical, comerse las placentas y lavar a las crías.

La mayoría de las hembras son capaces de producir leche para sus crías desde el mismo momento del parto. Por desgracia hay animales que no llegan a producirla. En estos casos hay que recurrir a la leche maternizada que deberemos suministrar a biberón. Si es temporal solo será una pequeña molestia si no es un problema grave. El animal no es válido para la cría y seguramente no seamos capaces de sacar adelante a todos los cachorros.

Otros problemas que pueden darse es que la madre rechace a las crías o las ataque. Habrá que recurrir a la crianza artificial y habrá que descartar a la hembra para futuros intentos.

En el momento del nacimiento las crías miden entre 2,5 y 4 cm, son incapaces de valerse por si mismas (sordas y ciegas) y carecen de pelo.

Hay que vigilar a la hembra para ver si cuida a sus cachorros, pero se la debe de dejar lo más tranquila posible y no tocarla ni a ella, ni a los cachorros, ni el nido en las 48 horas posteriores al parto.

No hay que limpiar el nido durante las primeras tres semanas. A partir de este momento conviene empezar a coger a las crías para que se acostumbren al contacto humano.

A partir de la quinta o sexta semana abren los ojos, y se les puede empezar a enseñar a alimentarse en un recipiente.

Para terminar os dejo un articulo que escribió Sergi para los que tienen una hurona en celo y no sepan como actuar.

"Si no hay macho de por medio, la hembra puede permanecer en celo durante toda la temporada de cría, es decir hasta agosto. Esta exposición prolongada a estrógeno, puede causar anemia, e incluso la muerte. Además la vulva al estar más abierta y constantemente humedecida con flujo, proporciona el medio ideal para que se instalen bacterias u otros organismos patógenos que lleguen a producir endometritis o pyometra, es decir infecciones uterinas, que también pueden ser fatales.

Si se produce una pérdida de peso importante, deshidratación, fiebre o palidecimiento de encías y almohadillas de las patas, o la ves rara por otras cosas, llévala ya a un veterinario.

Para evitar estos problemas con el celo piensa en castrarla cuando no esté en celo, ya que durante ese periodo el incremento en el suministro de sangre al útero, hace aumentar el riesgo de hemorragias y otras complicaciones durante una operación quirúrgica.

Si pasas de castrarla se les inyecta gonadotropina coriónica, la cual actúa como la LH (hormona luteinizante), osea para promover la ovulación. La primera dosis se suele administrar cuando la vulva ha alcanzado su máximo tamaño (en general al cabo de unas dos semanas de que notemos un incremento de secreción del flujo), al cabo de pocos días empezará a decrecer su tamaño para completar el proceso aproximadamente en una semana.

Si esta primera dosis no surge efecto se puede repetir la inyección de la hormona un par de veces más, si esto te falla lo más recomendable ( y quizás lo más sano)es dejar de administrar la hormona y utilizar inyecciones de amor, osea buscar un macho bien potente para que se produzca la cópula (no importa que el esperma no sea fertil, la cosa va por estimulación de la pituitaria...pero lo dejo porque al final no vas a saber si tienes un hurón o una nave espacial).

Se que también algunos veterinarios utilizan algunas píldoras anticonceptivas para gatos, como substitutivo de la gonadotropina, pero no se como van. La gonadotropina suele ir bién."

Sergi

Para más información consulta:
Todo Hurones en Español - Celo en las Hembras